¿Ayuda realmente leer un libro de autoayuda? Libros de “Superación personal” los llaman algunos, pero le pongamos el nombre que le pongamos, sigue siendo lo mismo. Vivimos una época frenética, llena de tambaleos y ahogos personales, y por mucho que queramos, no podemos con todo ¡No somos dioses! Y una ayudita extra nunca viene mal.
¡Se han puesto de moda los libros de Autoayuda! He escuchado en más de una ocasión, ¿Realmente creemos que es una simple moda? Muchas veces nos movemos por modas, esto es cierto sin duda, pero no creo que sea el caso. ¿Nos hemos vuelto todos locos de repente? Suena bastante exagerado, pero cada vez estoy más convencida de que es realmente lo que nos está pasando. Ha llegado un momento en el que, la mayoría de nosotros, nos vemos desbordados por cantidad de problemas que se van sumando, y vamos acumulando sin poder remediarlo, y lo que es peor, sin poder resolver la mayoría de ellos.
Trabajo, o lo que es peor, falta de él, dinero (¡está todo carísimo!, y los sueldos no ayudan), familia, parejas, hijos, tiempo…no, más bien, ¡Falta de tiempo! A lo que tenemos que sumar nuestra obsesión por el cuidado personal, o más bien por el “no cuidado personal” ¡Falta de tiempo de nuevo!, y falta de ganas, sin duda, pero que hay que sacar de donde sea ¿por qué? Porque la sociedad lo exige, lo demanda, lo quiere y lo necesita. Todo esto nos lleva a una situación emocional alarmante, llena de estrés, bajones de ánimo, falta de autoestima, frustración e incluso depresión.
Muchos de estos libros de autoayuda, o superación personal, nos darán un empujón para llegar a nuestro objetivo, que no es más que la búsqueda de la felicidad, la tranquilidad, saber gestionar nuestras emociones, sentirnos completos, y sobre todo aprender a querernos un poquito más.
Entre los mejores de este año 2017 destacamos “Hygge. La felicidad en las pequeñas cosas”, Meik Wiking; “Tu segunda vida empieza cuando descubres que solo tienes una”, de Raphaëlle Giordano; “Los secretos que jamás te contaron: Para vivir en este mundo y ser feliz cada día”, de Albert Espinosa